No es que me caiga mal, sólo que no me simpatiza

No sé cuál es el proceso para relacionarse y tomar confianza de la mayoría de personas, pero al menos yo tengo tres etapas: conocer a la persona, entablar conversación y, si se puede, hacer bromas. Todas las etapas en ese orden. Me he encontrado con gente que a los pocos minutos se pone a "fregar" con uno, sin embargo, es fácil confiar en ellos, y no es que salten etapas sino que el proceso se da más rápido. En otros casos, ni un millón de años pudiera confiar en ellos. El punto es que en los últimos meses he conocido a una persona, una señorita, que de plano ha querido saltarse etapas haciéndome supuestas bromas, pero sin poder yo tratarla de la misma forma. El asunto es así: ella llego a trabajar en mi grupo de la parroquia con el novio. De entrada la vi muy seria. Nadie me dijo nunca "Mirá ella es Fulanita". Con el tiempo, y sin haber hablado con ella, me comenzó a hacer bromas, supuestas bromas. Por ejemplo, en una actividad yo andaba buscando una silla y vi que una a la par de ella. Me acerqué y le pregunté si la estaba usando. Me dijo "Si". "Ok, gracias", contesté yo y ya me iba cuando se comenzó a reír y yo me quedé serio sin entender que sucedía y sólo me dijo "Es paja, agárrala". La agarré y me fui confundido.
Todas las bromas son de este tipo, y no es que sea delicado, la cosa es que no me simpatiza. Tampoco es que me crea la "divina babosada". Por el momento asumo demencia y no digo nada. Quizás la cosa se arregle acercándome a ella y platicando, sin embargo esto es muy difícil cuando se tiene un prejuicio.
Ahora bien, el asunto no me quita el sueño, pero me ha entrado curiosidad la forma que tiene la gente de relacionarse. Y pensar que esta es una necesidad básica de los seres humanos...