Creo que nunca les he mencionado que mi familia por parte de papá es bien grande: tengo nueve tíos y tías, cada uno con sus hijos y esposas o esposos. Aparte, hay toda una familia que apenas conozco, como primos de mi papá, medios hermanos y tíos abuelos. Uno de estos últimos era el carismáticos "tío Guayo", quien murió el domingo en la madruga. Era un tipo tan alegre que toda la familia lo quería un montón, prueba de ello es que en tres horas todos nos dimos cuenta de su muerte y nos fuimos sin pensarlo mucho para Ataco, Ahuachapán. Bueno, como mis hermanos tenían sus compromisos y mi mamá estaba enferma, sólo fuimos mi papá y yo de mi familia.
El viaje estuvo tranquilo, como siempre. Sin embargo, al llegar allá, nos dimos cuenta de algo sumamente preocupante y triste: mi tío fue una victima indirecta de la delincuencia. Sucede que ellos, él y la esposa, habían pasado algunos días acá en la capital y, al llegar allá, les hablaron por teléfono pidiéndoles dinero sino querían morir. Más tarde la llamada se repitió. Obvio, alguien de sus edad no asimila algo así tan fácilmente. Así que, esa misma noche, pidió a la esposa que le pusiera algo de música y a la media noche se fue a acostar. A las dos de la mañana, mientras dormía, le dió un infarto.
El momento más triste fue cuando llegó mi abuela, hermana de él...
Así que, sólo me queda decirles que tengan cuidado con las llamadas telefónicas, nunca den más información de la debida y, de ser posible, cambien a Servicio Privado. Alguien por ahí vivió una situación similar ya.
Saludos.
El viaje estuvo tranquilo, como siempre. Sin embargo, al llegar allá, nos dimos cuenta de algo sumamente preocupante y triste: mi tío fue una victima indirecta de la delincuencia. Sucede que ellos, él y la esposa, habían pasado algunos días acá en la capital y, al llegar allá, les hablaron por teléfono pidiéndoles dinero sino querían morir. Más tarde la llamada se repitió. Obvio, alguien de sus edad no asimila algo así tan fácilmente. Así que, esa misma noche, pidió a la esposa que le pusiera algo de música y a la media noche se fue a acostar. A las dos de la mañana, mientras dormía, le dió un infarto.
El momento más triste fue cuando llegó mi abuela, hermana de él...
Así que, sólo me queda decirles que tengan cuidado con las llamadas telefónicas, nunca den más información de la debida y, de ser posible, cambien a Servicio Privado. Alguien por ahí vivió una situación similar ya.
Saludos.