¿Y si hacemos un mejor país?

Durante los últimos nuestro país se ha visto afectado por una ola de violencia incontrolable. Robos, asesinatos, violaciones están a la orden del día. Cada mala noticia, los ojos giran sobre los políticos y autoridades; sin embargo, usted, amigo lector, y yo podemos hacer algo. Claro, muchos podrían decir que no matan, no roban y pagan sus impuestos: hacen su parte. Pero, ¿es eso suficiente?

Veamos algunos puntos en los que podemos hacer nuestra parte:

1. El tráfico. Darle el paso a alguien puede evitar una "trabazón", por ejemplo. Conozco gente que hace verdadera conciencia para que se respete el espacio de las personas discapacitadas en los parqueos. Tampoco es necesario usar el pito a cada instante.

2. Piense luego hable. Así es, algo tan simple. Muchas veces mal interpretamos las primeras palabras y en base a eso reaccionamos. Al mantener la calma es posible pensar mejor.

3. Escuche. Guardar silencio es un arma poderosa. La gente se siente en confianza y puede liberarse de cargas al hablar con nosotros.

4. Tome agua. El agua es importante para nuestro cuerpo, gracias a ella se pueden realizar muchas funciones vitales de nuestro organismos; además se evitan enfermedades.

5. Done sangre. Nunca se sabe quien podría necesitarla, los accidentes ocurren y, contrario a lo que mucha gente piensa, no duele.

6. Practique algún deporte. Es bueno para la salud y se libera estrés. Y recuerde, correr por la oficina de un lado a otro no es deporte.

7. No crea todo lo que publican los medios. El objetivo de cualquier periódico es vender más y el de los canales, tener más audiencia. Debido a ello tienden a agregar una buena cuota de drama a las cosas. Cuidado con eso. Sea objetivo, piense.

8. Cuide los recursos naturales. No son ilimitados. El calor a niveles históricos y la lluvia exagerada son pruebas de que se están agotando. Reducir su tiempo en la ducha o apagar el chorro cuando se lave los dientes son medidas sencillas pero efectivas.

9. Haga labor social. No me refiero a que renuncie a su trabajo y pida empleo en alguna fundación humanitaria. Cualquier cosa por pequeña que parezca sirve. Si usted sale de su casa o lugar de trabajo en cualquier momento, de seguro encontrara a una persona que no tiene que comer. Incluso puede adoptar a un perrito. Existen muchas opciones más.

10. Consuma lo nuestro, consuma productos nacionales, dele trabajo a un salvadoreño. Muchos dicen que la calidad es inferior, pero, ¿ya los han probado? Estoy seguro que la competitividad han colaborado a la mejora de lo hecho en nuestro país.

El objetivo de todo es unirse a una causa. Hagamos país.