Ayer, como todos los domingos, me dispuse a leer Séptimo Sentido. Por lo general soy bastante exigente con lo que leo y antes de comenzar le doy una ojeada a toda la publicación para seleccionar los reportajes que me llamen la atención. De entrada me encontré con un artículo de Jacinta Escudos titulado "Corre, Hilda, corre", que me dejó lágrimas en los ojos y cierto sentimiento de culpa y de impotencia: el escrito en cuestión trata sobre las condiciones en que viven los animales en los circos. En mi vida me imaginé el maltrato al cual son sometidas estas pobres criaturas. Y no sólo en circos. Sin embargo, el victimario es siempre el mismo, el hombre. Claro uno no se imagina: uno ve los anuncios por TV y el deseo por entretenerse lo lleva a estos lugares. Y vamos con nuestros hijos, nietos, sobrinos, vecinitos, etcétera. Pero por eso mismo he aprendido que uno tiene que informarse de todo. No es natural que los animales estén en cautiverio. No es normal que realicen estas actividades o "trucos". Las condiciones del viaje son horribles y más para seres cuyos ambientes naturales son opuestos.
Pero mejor me callo y dejo que hagan clic en el link para leer el artículo de Jacinta. De veras que cambia la percepción de las cosas.
Y por favor, no vayan a circos con animales o a espectáculos donde los exploten.
2 leyeron y piden la palabra:
Justo hoy hablaba con un tipo sobre el maltrato animal y el me dijo que hay animales que son "demasiado estúpidos" para darse cuenta que están siendo maltratados. No entiendo por qué es tan difícil de entender que hay que respetar a las cosas vivientes. Los circos son sólo una de los muchos escenarios de maltrato animal, por lo cual hay que informar a la gente y tratar de crear conciencia.
Yo a tu amigo le respondería: "¿Qué más estúpido que un animal que no se da cuenta o un tipo que si se da cuenta pero que no hace nada?" Digo, un pobre animal es irracional... Gracias por comentar.
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